Luo Yang 罗洋 Conversaciones en torno a su fotografía

18.04.2024

Nuestra redactora Ana Isabel Nsí explora el concepto de feminidad a través de los ojos de la fotógrafa Luo Yang y de Lucia Sun.

Una de las fotografías de Luo Yang, de la serie 'Apartamento Magazine'
Una de las fotografías de Luo Yang, de la serie 'Apartamento Magazine'

Luo Yang 罗洋 (1984) nació y creció en la provincia de Liaoning, en el noreste de China. Se graduó en la prestigiosa Academia de Bellas Artes Lu Xun en Shenyang en 2009. Estudió diseño gráfico y debido a su interés y talento por la disciplina, decidió dedicarse a la fotografía. Trabaja casi siempre en analógico y actualmente se desarrolla como fotógrafa independiente en Beijing y Shanghai.

Su obra es sorprendente, sencilla y rompedora. Retrata la fuerza de la vulnerabilidad, el poder de la delicadeza. Fotografía la feminidad.

'Girls' (2007) fue su primer trabajo; un proyecto tanto biográfico como social que lleva más de 10 años en producción. Con él buscaba encontrar el conocimiento y el entendimiento propio y ajeno. Yang lleva una década haciendo fotos para conceptualizar la feminidad y la identidad de las mujeres en la China actual; uno de los países del mundo que cambia más rápidamente. A través de sus fotografías, por tanto, captura a una generación de mujeres que están experimentando los cambios de la China moderna y el desconcierto que eso trae consigo. Busca romper los estereotipos impuestos por las sociedades occidentales.



Rápidamente, si hacemos un breve recorrido histórico con los momentos más relevantes de la historia del arte contemporánea china, es a partir del 1985 cuando los artistas empiezan a organizar exposiciones. La 85 New Wave (celebrada en 1985), y, un poco más tarde, China / Avant-Garde, inaugurada el 5 de febrero de 1989 en el Museo Nacional de Arte de China. Fue una exposición histórica que tenía como objetivo representar una revisión integral de las diversas prácticas de arte experimental que habían surgido en la China continental entre 1985-1988. El resultado fue una exposición masiva con más de 180 artistas y 290 obras de arte. La exposición se convirtió en una ocasión sin precedentes para el arte experimental chino. Sin embargo, fue clausurada por el gobierno solo dos horas después de su apertura tras el tiroteo. Aquellos disparos serían considerados por los medios «los primeros disparos de Tiananmen». (Mañeru, 2023)

Los traumas y descontento con lo que había sucedido en la Revolución Cultural y el periodo maoísta, hizo que se empezaran a adoptar corrientes filosóficas y de pensamiento como las teorías postmodernas, que sentaron la base de su modernidad en desarrollo. A partir de ese momento, los artistas se abrieron a los movimientos de vanguardia llegados de Occidente. (Mañeru, 2023)

Respecto a la feminidad, resulta obvio que el arte oriental estuvo marcado por el colonialismo que representó a la mujer como una flor frágil y delicada, papel que transformó el comunismo con el ideal de la mujer trabajadora. Sin embargo, los movimientos estudiantiles, especialmente las mujeres artistas comenzaron a romper esos estereotipos, expresándose a través del desnudo, las flores y los sentimientos, aspectos todos ellos que se convirtieron en actos de desobediencia. (Rocio & Rocio, 2020)



Volviendo a Yang y a colación con lo anterior, en una entrevista, la artista comentó que, aunque en occidente sus obras se interpretan inevitablemente desde una perspectiva política o feminista, ninguna de esas era su intención. La gente en China ve sus fotografías como un registro honesto y sencillo de la vida de las niñas y mujeres, por simples que sean. Ella no busca provocar ni rebelarse contra el sistema. Su serie describe simplemente la vida en China de sus protagonistas y celebra y exprime su realidad.

Aunque su intención no fuera reivindicativa, su obra rompe moldes. A través de este recorrido, nos describe la identidad de la mujer a través de más de 100 mujeres de su generación que le han permitido mostrar los cambios de sus cuerpos y vidas; la nueva mujer china no teme a la libertad, a la independencia ni a la ruptura de los estereotipos y esquemas que la tradición tiene reservada para ellas. Es también una forma de hablar sobre China y cómo el progreso ha cambiado al país y a su población a lo largo de este devenir histórico y cultural, especialmente a las mujeres chinas, que han roto con todas las herencias tradicionales para elegir su propia vida.

Las mujeres retratadas desprenden seguridad y fragilidad; se desnudan tanto física, mental y emocionalmente y se enfrentan al objetivo con firmeza. Se puede palpar la emoción en cada una de sus fotografías. La autora empatiza con sus modelos y encuentra una conexión entre ella y las mujeres a las que fotografía; ahí es donde reside la fuerza del proyecto.



"Al fotografiarlas, entiendo su vida mejor y eso hace mi mundo más grande y ancho. Puede que tengamos diferentes valores y visiones sobre la vida, pero todas tenemos en común la fragilidad y la valentía dentro de nosotras. Nos enfrentamos al mundo con nuestra sinceridad."


Yang también se adentra en reflejar la necesidad de oportunidades económicas y de movilidad social, así como la competitividad en la sociedad china. Los jóvenes chinos de la actualidad no se sienten representados con la China de antes. Como nos comentaba Ouyang, activista y cocreadora del podcast Generación Banana, la sociedad china es percibida de maneras muy distintas por los jóvenes actuales. En su caso, se abre una brecha muy grande; la lingüística, la cultural y el no sentirse identificada con los valores que el país representa. 'Hay mucho estigma sobre si de verdad se respetan esos valores y si se podrá vivir en libertad, especialmente el habitar los espacios siendo mujer. Hay también mucha diferencia entre las mujeres chinas que viven allí, las mujeres chinas migrantes y las mujeres chinas nacidas en occidente.

La representación que se hace de la mujer china es muy diferente según la mirada: la occidental o la propia.'

Aquí en España se vive otra realidad. Siguiendo con las palabras de Ouyang:

'La obra de esta fotógrafa es simplemente retratar, como ella misma comenta, sin ninguna otra pretensión. Sin embargo, si nos ubicamos en un país occidental, un trabajo así acaba generando un discurso entorno a su proyecto porque son cuerpos racializados y la feminidad asiática está politizada. Esto es algo de lo que no podemos escapar. 'Liwai' (mediadores culturales que promueven acciones interculturales centradas en la comunidad china en España) es un ejemplo de ello. Con sus intervenciones y propuestas, por simplemente estar y hacer, ya es un hecho reivindicativo per se. Que yo sea actriz de doblaje y también sea una persona china, en cierto modo se podría entender como algo "revolucionario", porque se le está dando un espacio a mi voz.
Lo que nos pasa a los creadores es que en occidente se nos considera minorías; no podemos separarnos de las lecturas que van atadas a nuestros cuerpos desde una mirada externa. Ahí radica la gran diferencia.'


Porque, ¿qué es ser una mujer china? La artista y fotógrafa Lucia Sun lo explica muy bien. Esto es algo muy genérico, -nos comenta-. 'Da igual que sean chinas, japonesas o españolas. Lo que sí puedo darte es una descripción de la mujer china migrante. No existe un colectivo homogéneo de mujeres chinas migrantes o segundas generaciones. De la misma manera, sería del todo inviable hacer un perfil único de las mujeres chinas migrantes porque no todas han emigrado por las mismas causas; tampoco todas ellas tienen el mismo origen, ni el mismo contexto vital. Comparten alguna problemática común, pero cada mujer migrante tiene su propia historia.

Si se piensa en la mujer china, el imaginario colectivo visualiza una mujer abnegada, conformista, sumisa, dócil y, sobre todo, víctima de los intereses empresariales de su familia. Ni siquiera las mujeres españolas llegan a pensar que sus congéneres chinas tengan las mismas preocupaciones que ellas, y que tanto unas como otras luchan por conquistar el espacio público o por la justa participación en la sociedad.

Debemos tener claro, por tanto, que la mujer china, en este caso en España, sufre una triple discriminación: primero por ser una mujer migrante, luego por ser racializada como china y, finalmente, por ser mujer.'



Hablamos también con la fotógrafa Lucia Sun, cuyo trabajo tiene mucho que ver con el de la fotógrafa china Luo Yang. Ambas retratan a la mujer china, pero desde diferentes prismas. En este caso, desde la mirada propia, pero en diferentes contextos. En su proyecto 'Techo de Bambú', rompe estereotipos e ideas preconcebidas que tiene la gente acerca de las mujeres chinas. Intenta, a través de la fotografía, retratar a mujeres asiáticas reales con la finalidad de destruir una serie de prejuicios y clichés fuertemente imbricados en el ideario colectivo que dificulta su integración social y sociolaboral además de una imagen estereotipada de una comunidad. ¿Qué estereotipos quieres romper con tus imágenes, con este proyecto?

'Ya no solo estereotipos. Con mis imágenes me gustaría proyectar esa idea de personas chinas reales que no parodien a la comunidad, personas de verdad, de carne y hueso, que contrarresten los habituales sketches de los humoristas y que enriquezcan la contra hegemonía discursiva.

También con mis fotografías me gustaría ser referente para todas aquellas personas chinas migrantes y de segunda generación que quieran dedicarse al arte y que se sientan bloqueados o responsables de seguir la tradición familiar marcada.'

También lo comentaba Ouyang y ambas coinciden ante la pregunta de si aún hoy, en pleno siglo XXI, se sigue estigmatizando, fetichizando y perpetuando clichés en la fotografía y el audiovisual cuando se representan a mujeres no blancas, en este caso, mujeres chinas.

'Hay una larga historia de misoginia y violencia dirigida específicamente a las mujeres asiáticas por parte de hombres de todas las razas, incluidos los asiáticos, contesta Lucia.

La fetichización de las mujeres asiáticas ha sido reforzada por la cultura popular. Las mujeres de origen asiático han sido estereotipadas durante mucho tiempo como sumisas sexualmente y se les representa en la cultura popular como "flores de loto" exóticas, "damas dragón"; esto hace que se las deje sin individualidad. Han sufrido reacciones negativas por no concordar con los estereotipos y se les ha acosado por ese mismo motivo.'

Tras esta conversación, solo queda reflexionar sobre cómo puede el arte cambiar nuestra mirada. Por eso son muy necesarios estos proyectos en la escena cultural y también incluso en la sociedad, como un pequeño paso para deconstruirnos, escuchar otras voces, percibir otras miradas, empatizar y el ver en el arte un medio para, por qué no, cambiar el mundo.

¿Qué consideras que es feminidad?

Es una combinación de vulnerabilidad y dureza, la cosa más asombrosa y hermosa del mundo. (Luo Yang 罗洋)


Realizado por Ana Isabel Nsí