La transición poética-política de Neruda

25.05.2022

El autor Daniel Guitérrez analiza los motivos de la transición estilística que sufrieron los versos del poeta chileno.

Fuente: El club de los libros perdidos

De lo sonoro salen números,

números moribundos y cifras con estiércol,

rayos humedecidos y relámpagos sucios.

De lo sonoro, creciendo, cuando

la noche sale sola, como reciente viuda,

como paloma o amapola o beso,

y sus maravillosas estrellas se dilatan.

Yo vivía en un barrio

de Madrid, con campanas,

con relojes, con árboles.

Desde allí se veía

el rostro seco de Castilla

como un océano de cuero.

Si no somos conocedores de la obra de Pablo Neruda y nos pidieran que identificáramos al autor o autores de los versos anteriores, difícilmente atinaríamos a señalar que fueron escritos por un mismo poeta. Sin embargo, como ya os podéis imaginar, a pesar de la divergencia que reflejan en cuanto a estilo y contenido, estos versos fueron escritos por un único autor: el inigualable, controversial y legendario poeta chileno Pablo Neruda.

Mucho se ha escrito y hablado del cambio poético y estilístico nerudiano, pero lo cierto es que la crítica no termina de aportar unas razones claras y unísonas para esta transmutación, por tanto la pregunta ¿Qué ocurrió realmente para que el poeta chileno abandonara el estilo vanguardista que tanto reconocimiento le otorgaba? Aún se encuentra exenta de respuestas contundentes y convincentes.

A pesar de la gran responsabilidad y la ardua tarea que implica, en este artículo intentaremos descubrir y exponer algunas razones que encuentro claves para comprender la transición poética-política que Pablo Neruda llevó a cabo entre las décadas de 1930 y 1940.

Comenzaremos identificando los versos que hemos visto, situándolos así en un contexto y obra:

Los primeros versos pertenecen a "Un día sobresale", poema que abre Residencia en la tierra II. Fue escrito en Chile a mediados de 1933, después de un amargo retorno a su país natal tras su andadura como diplomático por los remotos países de oriente. Esta travesía intercontinental desembocó en un periplo transcultural y translingüístico que, sin duda, provocó en el poeta una honda resonancia metafísica y lo haría meditar sobre la totalidad de la vida. ¿Qué características encontramos en la poesía de esta época? El uso del verso libre, una sintaxis venida a menos, un discurso y ritmo caudaloso que provoca un texto palimpsesto y un mensaje poético difuso. Si analizamos los versos seleccionados: "De lo sonoro salen números,/números moribundos y cifras con estiércol,/rayos humedecidos y relámpagos sucios.", parecen aludir al despertar en el nuevo día de la masa (números) trabajadora que emana una energía débil (rayos humedecidos), una interpretación que encaja con la visión sobre el artista en la sociedad moderna: "representa la respuesta y la oposición absoluta, cargada de sentido metafísico, frente a la deshumanización real y concreta de los hombres en una sociedad dominada por la alienación". De esta forma, lo sonoro aludiría a que el día se inicia con un conjunto de ruidos que irrumpen en el alba.

Por otro lado, los versos contiguos pertenecen al poema "Explico algunas cosas", incluido en su poemario Tercera residencia publicado en 1947. Este poemario fue publicado en Buenos Aires tras su estancia en España. La diferencia estilística respecto a los versos anteriores es evidente a simple vista: versos mucho más figurativos, donde el mensaje poético se capta fácilmente gracias a lo descriptivo de sus palabras. El sujeto poético es clave para descubrir la diferencia entre ambos poemas y las intenciones de cada uno; mientras que en el anterior hay una ausencia, en este poema el sujeto es el yo, quien describe una situación personal.

Lo cierto es que entre la escritura de un poema y otro transcurren más de diez años. Veamos, pues, qué ocurrió durante este tiempo en la vida de Neruda. Como veníamos diciendo, durante la escritura de Residencia en la tierra I y II Neruda se encontraba siguiendo los impulsos románticos de la atmósfera surrealista, alejado de la palabra pura y la lírica conceptual, siendo uno de los encargados de la fundación de la primera vanguardia literaria en América de habla hispana. Neruda practica esta tendencia vanguardista durante más de diez años (ya en Tentativa del hombre infinito (1926) encontramos algunos tintes surrealistas). El hecho clave que hizo cambiar el rumbo de la poesía de Pablo Neruda para siempre ocurrió en Madrid, durante su estancia en la mítica Casa de las flores. Neruda ejercía como cónsul en la capital española, y es aquí donde afianza una amistad con algunos poetas españoles de la llamada Generación del 27 como Alberti, Miguel Hernández... y su querido e inseparable Federico García Lorca. También es aquí donde nace su hija Malva Marina y donde conoce a su futura esposa Delia del Carril. España le estaba brindando un clima de confianza, un hogar tras su larga travesía por los países asiáticos, su fatídico regreso a Chile y un intermitente paso por Argentina. 

Sin embargo, todo comienza a torcerse con el comienzo de algunos hechos e incidencias a causa de la política española, entre las que destaco la Insurrección asturiana que tanto impacto tuvieron en el poeta chileno. Quizás influenciado por algunos de sus amigos españoles (Alberti, Miguel Hernández), Neruda comienza a ver cada vez con peores ojos al régimen feroz que mata y termina en un levantamiento militar contra los obreros asturianos y, entre otras consecuencias, provocan el exilio de Alberti. Unos hechos que finalmente desembocaron en la Guerra civil española y el asesinato de su querido amigo Federico García Lorca. Neruda no podía traicionar a la España que tanto amor le había mostrado y que lo había acogido. De esta forma, no podía seguir practicando una poesía ensimismada y metafísica, los sucesos acaecidos en Asturias habían encendido algo en el chileno que provocó su reacción y opinión. El propio Neruda, consciente del gran cambio que estaba experimentando su poesía a causa de estos hechos y de la posible incertidumbre por parte del lector al estar acostumbrado a una poesía vanguardista, decide dar los motivos de su mutación lírica:

PREGUNTARÉIS: ¿Y dónde están las lilas?

¿Y la metafísica cubierta de amapolas?

¿Y la lluvia que a menudo golpeaba

sus palabras llenándolas

de agujeros y pájaros?

Os voy a contar todo lo que me pasa."

"Preguntaréis por qué su poesía

no nos habla del sueño, de las hojas,

de los grandes volcanes de su país natal?

Venid a ver la sangre por las calles,

venid a ver

la sangre por las calles,

¡venid a ver la sangre

por las calles.

Como podemos leer, la clave de su transformación no es más que la sangre, las muertes y la injusticia que Neruda estaba percibiendo en las calles españolas, por lo que no podía seguir volviendo la mirada a estos hechos.

Como conclusión, podemos utilizar las palabras que el crítico Amado Alonso utilizó para describir el cambio que mostró Neruda a partir de estos acontecimientos: "no más de ensimismada soledad, de angustia metafísica y de visión de muerte... desde ahora su poesía es la del hombre con los hombres [...] una poesía social y de combate político, de adhesión y repulsión para el prójimo, de alegato y execración, de esperanza y rabia: de acción", y es que, tras los hechos señalados, Neruda abandonó para siempre su indagación metafísica para centrarse en la lucha política y social.


Daniel Gutiérrez


  • Fuentes

Concha, Jaime (1963). "Interpretación de Residencia en la tierra de Pablo Neruda", Santiago, Mapocho, pp. 5-39.

Alonso, Amado (1951). Poesía y estilo de Pablo Neruda. Interpretación de una poesía hermética. Buenos Aires, Sudamericana.

Neruda, Pablo (1999b). Obras completas I: De "Crepusculario" a "Las uvas y el viento" 1923-1954, Barcelona, Galaxia Gutenberg.

Neruda, Pablo (2018a). Residencia en la tierra. Edición crítica de Hernán Loyola. Madrid, Cátedra.


Editado por Iván Trujillano